Italia

Guia de viaje de

Venecia

Basílica dei Santi Giovanni e Paolo

La Basílica dei San Giovanni e Paolo de Venecia es el monumento religioso más grande de la ciudad. Un ejemplo de la arquitectura gótica veneciana que debemos descubrir en nuestra visita a Venecia

Viajar a Venecia, recorrer Venecia y pasear por Venecia, requieren las tres llevar intacta la capacidad de maravillarse y de sorprenderse a cada rincón. Con esta capacidad intacta la ciudad pondrá el resto y será Venecia quien lleve las sorpresas al infinito, incluso más lejos. No habrá esquina que doblemos, que no tenga algo que mostrar, no hay calle que no lleve a algún lugar para admirar.

Así es Venecia, así se nos presenta y con esto en la mente debemos adentrarnos en ella. Tiene además Venecia un secreto, o no, quizá mejor sea decir que tiene un truco. Tiene la habilidad, casi la manía, de, en ocasiones, hacer que lo que no parece sea, que lo que no aparenta luzca. Esta magia la hace, por ejemplo, en la Basílica dei San Giovanni e Paolo. Aparentemente, una Basílica, tirando a austera, pero nada más lejos de la realidad. Parémonos entonces un momento en esta plaza. Aquí, compartiendo espacio con la Scuola San Marcos y con la estatua ecuestre dedicada a Bartolomeo Colleoni de tres metros y medio y obra de Andrea del Verrocchio, está la imponente iglesia dei San Giovanni e Paolo.

Hereda su nombre de los santos San Giovanni y San Paolo que en el siglo III sufrieron martirio en Roma bajo el mandato de Julián el Apóstata y es una de las iglesias más importante de la Sereníssima, no en vano es uno de los mayores panteones de la república, pues fue el lugar elegido por los dogos para sus entierros. Hechas las presentaciones, solo nos queda la visita a la Basílica de San Giovanni e Paolo. Los venecianos, en su ya vetusta costumbre de abreviar los nombres, decidieron acortar este y ellos la conocen como San Zanípolo. Como quiera que sea ir hasta allí, no dejéis de incluirla en el itinerario de vuestra visita Venecia. Siempre que lo hagáis así, hacednos caso, Venecia va a desplegar toda su magia, nosotros pongamos al servicio de la misma el lienzo en blanco de nuestra sorpresa. Es imposible que, así, el viaje salga mal. ¡Venecia ya está, Buendía Tours (que se sorprende como nadie en cada vez!) os espera... nada puede salir mal!!!

Historia de la Basílica dei San Giovanni e Paolo de Venecia

La Iglesia San Giovanni e Paolo, la Iglesia más grande de Venecia, fue, según reza una leyenda por la ciudad, producto de un sueño. Pero no de un sueño entendido como un propósito o un deseo de ver algo realizado. No. Un sueño literal, y es que se dice que a Jacopo Tiepolo le dieron en un sueño las indicaciones precisas para la donación de los terrenos en los que había de levantarse el convento dominico di Santi Giovanni e Paolo. Este convento habría de dar cobijo a los numerosos “predicanti” que por estas fechas deambulaban por Venecia. Estamos en el siglo XIII. El acto de donación en el que, finalmente, se plasmó el sueño se llevaría a cabo en el año 1234. Pronto esta primera construcción se iba a quedar pequeña, así que, para adecuar el espacio a las necesidades crecientes, fue necesario acometer una ampliación, ampliación que fue llevada a cabo durante el siglo XIV con la dirección de dos frailes dominicos: Fra. Benereunto de Bologna y Fra Nicolo da Imola. La nueva Iglesia se acabó en el año 1368, pero no la iban a consagrar hasta unos años después, en 1430.

Entre aquel convento, fruto de la inspiración y la Iglesia remodelada, pasaron varias décadas, en realidad pasaron casi doscientos años, y en este transcurso del tiempo, surgió la intención gradual de hacer de este espacio el lugar de entierro de los dogi de Venecia. Fue poco a poco, pero fue firme está intención, tanto que en el siglo XV quedó oficialmente declarado que fuera en este lugar en el que se fueran celebrando los entierros de los dogos de la ciudad conforme estos se fueran sucediendo.

Arquitectura de la Basílica dei San Giovanni e Paolo de Venecia

La Iglesia de San Giovanni e Paolo es un ejemplo de arquitectura gótica veneciana.

La fachada de esta Iglesia de San Giovanni e Paolo de Venecia, que es con lo primero que nos vamos a encontrar, una vez hayamos llegado al campo, se inició en el año 1458 y fue posible llevarla a cabo gracias a las numerosas donaciones que la orden recibió para ello. Aunque a simple vista pudiera parecer austera (recordad la magia de la que os hablábamos al principio...) y, de nuevo a simple vista, pudiera parecer que carece de puntos de interés, ni la una ni la otra nos cuentan la verdad, pues sí que hay en esta iglesia gótica de Venecia elementos a destacar. Por ejemplo, a destacar es su pórtico de estilo, en esta ocasión renacentista, que vio la luz en el año 1463 y que hoy admiramos decorado con numerosas esculturas.

Este pórtico se atribuye a la mano de Bartolomeo Bon, uno de esos hombres hoy indispensables y aun muy presentes en toda Venecia. Otro de los puntos que os llamará la atención serán las columnas que sobresalen con el blanco de su mármol sobre el ladrillo del conjunto. Estas columnas que custodian la entrada principal fueron traídas aquí desde la iglesia de Santa María de la Asunción de Torcello (una iglesia bizantina de la iglesia de Torcello). No podemos adentrarnos en el templo sin dedicar un momento a admirar el rosetón que está en esta fachada, este rosetón vive adornado con cristal de murano y en lo más alto de esta fachada tres pináculos decorados con las estatuas de San Pedro, de Santo Domingo y de Santo Tomás.

Ahora sí, ahora continuamos nuestro recorrido por la Basílica San Giovanni e Paolo de Venecia dirigiéndonos hacia el interior del templo.

Interior de la Basílica dei San Giovanni e Paolo de Venecia

Poniendo rumbo al interior de la Basílica dei San Giovanni e Paolo de Venecia, una buena manera, quizá sea haciéndolo teniendo presente que lo que vamos a ver, es solo una parte de lo que había. La construcción original era más grande, pero los años hicieron que una parte fuera dedicada al Ospedale dei Mendicanti y otra a la Scuola Grande di San Marco.

El interior de la Basílica de San Giovanni e Paolo de Venecia, tiene forma de cruz latina, con tres naves de cinco tramos. Cuenta también con cinco ábsides y diez grandes y poderosas columnas. Si a primera vista la austeridad de la fachada nos engañaba, la austeridad que, de nuevo, a primera vista sale a nuestro encuentro, vuelve a engañarnos.

Hubo en el origen, en la nave central, un coro que ocupaba los dos primeros tramos de la misma, en visita aún podremos contemplar, a modo de recuerdo de lo que había, los altares de Santa Catalina de Siena y de San José. En el altar de Santa Catalina reposa, desde 1961, la reliquia de uno de sus pies.

Descartando definitivamente la austeridad, podremos admirar lo magnífico del presbiterio de la Basílica San Giovanni e Paolo de Venecia, con maravillosas ventanas góticas y con numerosos rosetones.

Y como toda Basílica que se precie, aquí también hay un altar mayor para apreciar. Este altar mayor  de la Basílica de San Giovanni e Paolo, se atribuye a Mattia Carnero y en él está la Virgen del Rosario con Niño, los Santos Domingo y Catalina de Siena, ambos de Clemente Moli, y los Santos Juan y Pablo, de Francesco Cavrioli.

No obstante, y quizá este sea el detalle que ya conocíais incluso antes de empezar la visita, si por algo es conocida esta Iglesia y si alga llama la atención y reclama tiempo, son sus monumentos funerarios, así que, vamos a pasear un momento entre ellos...

Monumentos funerarios de la Basílica dei San Giovanni e Paolo

Los monumentos funerarios de la Basílica dei San Giovanni e Paolo, adquieren entidad en este espacio por la decisión de los dogos de la ciudad de ser enterrados aquí. Esto hizo que la costumbre iniciada adquiriera forma de “ley” y que terminará por oficializarse que los actos solemnes por el descanso de estos ilustres hombres fuera en esta Iglesia de San Giovanni e Paolo.

Hay quien dice, incluso llegó a escribirse, que solo con estos monumentos funerarios bastaría para poder trazar la evolución de la escultura veneciana. A modo de referencia o de ayuda en el recorrido, os diremos que son en torno a 25 los dogos que están aquí enterrados, de los monumentos que dan cuenta de ellos, son siete los que nos permiten ver esta evolución escultórica, a saber:

  • Monumento al dogo Marco Corner, con una Madona de Nino Pisano
  • Monumento al dogo Michele Morosini,
  • Monumento al dogo Tomaso Mocenigo.
  • Monumento al dogo Pasquale Malipiero.
  • Monumento al dogo Nicolo Marcello.
  • Monumento al dogo Andrea Vedramin.
  • Monumento al dogo Pietro Mocenigo.

La Iglesia calificada por algunos como el Panteón de Venecia, no solo vela por el reposo de los dux. Otros personajes importantes de la historia y de la vida de la ciudad de Venecia eligieron para ellos la misma paz. Entre ellos: Vettor Pisani, Sabastiano Venier, los Bellini, Lorenzo Lotto, el mausoleo de la familia Valier es sin duda alguna impresionante, como impresionante es el conjunto de tres monumentos funerarios de las sepulturas de la familia Mocenigo. Puede que en la organización del viaje de Venecia, no se tenga muy presente la vista de monumentos funerarios, pero tanto por el entorno, como por lo impresionante del arte aquí volcado, vale la pena la visita a la Basílica de San Giovanni e Paolo.

Pinturas en la la Basílica dei San Giovanni e Paolo

No solo nos vamos a poder detener ante esculturas y ante grupos escultóricos en nuestro paseo por la iglesia. Son numerosas también las obras pictóricas que nos esperan en el interior, obras, por cierto, de autores tan conocidos y reconocidos como Giovanni Bellini, Paolo Verones o Guivanni Battista-Piazzeta.

Si hay dos puntos esenciales en cuanto a obras expuestas, son, sin duda, la Sacristía de la Basílica de San Giovanni e Paolo y la Capilla del Rosario.

En la sacristía de la Basílica, la visión será, como poco, maravillosa. Es inmensa, luminosa, grandiosa y está plagada de pinturas. Están aquí expuestas, entre otras, obras de Palma el Joven: “Resurreción” o “Adoración de la Cruz por Santos dominicos” y también de Odoardo Fialetti “Santos dominicos besando las llagas de Cristo” o el “Milagro del libro”.

En la CAPILLA DEL ROSARIO ocurre igual que en el anterior espacio, la exposición de pinturas vuelve a ser abrumadora. En la nave de esta capilla, fruto de las obras de rehabilitación de la Iglesia que se llevaron a cabo tras el incendio que la devastó en el año 1867, se colocaron, procedentes de la Iglesia dell'hermita alle Zattese tres obras del Veronés: “La Asunción”, “La Adoración de los pastores”y “La Anunciación”. Otras obras a admirar en esta capilla son “Cristo Muerto” de Gian Battista Zelotti; “Noli me tangare”, de Carlo Carlioni; “Martirio de Santa Cristina” de Sante Peranda; “Lavatorio de pies”, “Última cena” de Benedetto Caliari y “Milagro de Santo Domingo” de Alessandro Varottari.

Aparte de estos lugares, avanzad sin miedo por esta Basílica dei San Giovanni e Paolo de Venecia, haced que os perdéis en busca de algo, para daros cuenta de que os encontrasteis en busca de nada, y admirad lo que vais a ir encontrando, ¿Un ejemplo? Vale, os damos un ejemplo, “El retablo de San Vicente Mártir”, una de las grandes obras de Bellini (un Bellini que, por cierto, está enterrado aquí) un políptico de nueve encasamientos dispuestos a lo largo de tres filas.

Ubicación de la Basílica dei San Giovanni e Paolo

Cómo llegar a la Basílica dei San Giovanni e Paolo

    Vaporetto

    • Paradas: Ospedale y Rialto

Detalles

    Horario

    • 9:00 a 18:00 h - Días laborables
    • 12:00 a 18:00 h - Días festivos

    En Navidad y en Semana Santa cerrará entre las 12:30 y las 18:00 h

    Precio

    • General: 2,50 € (contribución para la restauración)
    • Discapacitado, Guía turístico, Seminarista y Profesor: Gratis